(Uno de los momentos claves de la definición: la bocha en el palo de Pastor en la ejecución de Etcheverry)
En lo personal vengo siguiendo este deporte desde hace casi una década, muy de cerca desde poco más de un lustro. Quizás por entonces uno no pensaba que el hockey iba a pegar un vuelco de semejante magnitud y calidad como el que está teniendo el santafesino en este momento.
Realmente causa una gran sensación de satisfacción ver a dos equipos del nivel de La Salle y Estudiantes animando la final de una competencia local, jugándolo como se tiene que disputar una final: por momentos con buen hockey; cuando no se pudo, con amor propio y sobre todo mucho amor por la camiseta.
Tras detener tres penales, 'Ceci' Pastor recordaba una y otra vez en cada una de las entrevistas que le hacían los penales del Nacional que no pudo atajar y de los cuales se tomó esta definición como una revancha. La 'derrota' y toda la gloria en el mismo momento.
La imagen muestra de un lado de la cancha, el emotivo festejo del equipo más ganador de Santa Fe en todos los tiempos consagrándose una vez más campeón. En un sector, una jugadora ‘salla’ tachaba en una bandera colgada arriba del arco el número 18. Al mismo tiempo, en la otra mitad de la cancha, las chicas de Estudiantes estaban con sus rostros maquillados en lágrimas por haber estado tan cerca de lograr algo que no todavía nunca pudo: quedarse con el primer título en una competencia organizada por la ASH. La 'derrota' y toda la gloria en el mismo instante.
Alguien alguna vez dijo: "El triunfo y la derrota solo sirven para las estadísticas pero la gloria siempre está".
Mihalik, Etcheverry, Pastor, Nim, Cena, Tochetti, Buslowicz, Dibur, Azcarate, Pianello, Aparicio, Pérez, Musuruana, Giraudón, Martino, Fernández, Otero, Maiztegui, Corina Diez, Schneider, Verónica Diez, Longo, Szupiany, Bedoya, Pimpinella, Mutio, Arceluz, Re, Gomítolo, Rodríguez, Geisser, Jacob, Daniel De Petre, Ariel Pérez Carli, Mancini, Petruceli, Videla. Treinta y siete apellidos que el sábado pasado se quedaron con toda, pero TODA LA GLORIA.
FUENTE: santafedeportivo.com.ar